Después de llegar a México DF, agarramos un taxi (no utilizar nunca la palabra «coger» ya que tiene un significado muy feo en Mexico).
El problema es que este taxista no puso un poco el miedo en el cuerpo, ya que nos comentó que es bastante habitual que le roben en los semáforos, pero no a él, sino a sus clientes. Y decía que si viene alguien en un semáforo y le toca el cristal, no quiere que le metan un tiro, por ello dejará que nos roben sin dudarlo.
Después de esta mala experiencia y varios avisos de una leve peligrosidad, los primeros días no los disfrutamos que hubiéramos querido. Nada más lejos de la realidad, ya que nos sentimos muy seguros en todas partes, eso sí, con mucha cautela sin enseñar la cámara y siendo discretos.
México Distrito Federal, és una ciudad gigante de casi 9.000.000 de habitantes. Es una ciudad de contrastes en que puedes ver unos edificios ultramodernos y a unos metros contariamente puedes encontrar varias chabolas con una enorme pobreza. A nivel arquitectónico, es una ciudad increíble, puedes encontrar enormes edificios modernos que contrastan que antiguas edificaciones que muestran la história de esta ciudad.
Una de las cosas que no me gustó, es el tráfico que teníamos que sufrir a diario. Para llegar al centro desde donde estábamos alojados teníamos que recorrer casi 2 horas entre un denso tráfico diario. Por la calle mucha gente se mueve rápidamente, demostrando que es una gran ciudad totalmente cosmopolita.
En el centro se encuentra el zócalo, así es como se llama la Plaza de la Constitución, con una medida de 46800 m² es una de las plazas más grandes del mundo. Es interesante ver la enorme bandera de México que ondea, mostrando la importancia que tiene el patriotismo en este País. Puedes encontrar varios negocios para comprar souvenirs o ir a comer comida típica Mexicana. Hay calles especializadas en electrónica.
Paseando por el centro hay calles llenas de tiendas y mucha gente paseando. Algunas veces te sientes un poco presionado por todos los vendedores que quieren ofrecerte miles de artículos, pero si les niegas educadamente, ceden y no se enfadan. La Torre Hispanoamericana, una enorme torre que te marca la orientación en cualquier lugar del centro.
Una curiosidad, es unos tradicionales organilleros que tocan un órgano que para mi parecer emiten un sonido totalmente desafinado, pero que a los Mexicanos les encanta ya que comentan que es muy antiguo, para gustos los colores. Los puedes encontrar por todos los lugares céntricos.
El sistema de transporte és un poco desordenado si no lo conoces, ya que es un poco difícil encontrar según que paradas de bus, pero es muy completo a nivel general, y muy económico (3 pesos cuesta el billete de metro, que son unos 18 centimos de euro). El metro es un buen medio de transporte, pero debes evitar ciertas horas punta (primeras horas de la mañana y entre las 17 y 19 horas), ya que puedes sentirte enlatado cómo una sardina. Es por ello que las mujeres y los niños están separados en vagón aparte en horas punta, comentan por antiguos casos de tocamientos involuntarios de hombres a mujeres. Otra curiosidad que me sorprendió es que dicen que hay un vagón (el último de una línea concreta) que es exclusivo para gente homosexual para que tengan encuentros y puedan conocerse.
El metro, a pesar de comentarnos varias personas que es muy peligroso, es vigilado por la policia contínuamente sin ningún peligro a la vista.
Una cosa que vimos a diario fue el culto a la religión. Mucha gente está contínuamente estaban acompañado de figuras santas. Así cómo puedes encontrarte pequeños templos de vírgenes y santos llenos de luces y flores en los sítios más insopechados.
Volviendo al tema de la seguridad, a pesar de no haber tenido ningún problema, se nota una cierta tensión en todas partes. Varias anécdotas nos marcaron el viaje. En un autobús desde las pirámides, hicimos una parada y un policía entró de incógnito y nos grabó con una cámara de vídeo a cada uno de nosotros y sin avisar. En ese mismo momento buscaban un asaltante de autobuses, el resto del grupo ya estaban capturados.
Además varias garitas están llenas de carteles que se buscan personas desaparecidas o las notícias de los diarios no son muy alentadoras con la violencia del narcotráfico, pero creo que son casos muy puntuales que el mismo turista no suele salir afectado.
No todo es malo en Mexico. Es una enorme ciudad con una gran oferta cultural y muchos museos para visitar …como curiosidad decir que sólo en Mexico DF es la ciudad con más museos del mundo, hay más de 110 para visitar. Nosotros visitamos el Museo de Antropología (único lugar que hemos conseguido descuento de estudiante extranjero), el cual deberías dedicarle más de un día entero para descubrir de una forma muy didáctica todas las culturas e história de Mexico, és impresionante. Otro Museo que nos gustó fue el de Frida Kahlo, personaje que no conocíamos su vida, pero vimos un vídeo con toda su historia muy interesante. Una visita obligada es el gran pulmón de la ciudad, un gran parque llamado «Chapultepec», tiene un gran lago para poder navegar con barca, eternos caminos llenos de paraditas y un castillo muy interesante para la visita.
Otra de las cosas que más nos gustó de la ciudad fue el barrio de Coyoacán que es muy interesante para perderse y descubrir todos sus rincones.
Aconsejamos dedicar entre 3 o 4 días para visitar Ciudad de Mexico y poder descubrir las cosas más interesantes.
¡¡Bienvenidos a México!!!
Podéis ver más fotos a la derecha de este post.